Yoga y Mindfulness: ¿Cómo ayudan a mi salud?

Durante la semana solemos pasar por diversas situaciones: Un mal día en el trabajo, una mala noticia, entre otros; haciendo que nos malacostumbremos a un estrés rutinario, sin llegar a ser conscientes de lo mucho que afecta a nuestra salud mental y lo simple que puede ser solucionarlo: ¡Les presentamos el Yoga y el Mindfulness!

Lo primero que se debe de aclarar es que, a pesar de compartir aspectos similares y que se enfocan en trabajar la mente, no son lo mismo. Cuentan con ciertas diferencias dependiendo del objetivo que quieras lograr. Sigue leyendo y conócelas.

El Yoga

¡La práctica ideal para conectar el cuerpo, la respiración y la mente! Por medio de posturas físicas, ejercicios de respiración y meditación para mejorar la salud general esta disciplina nos ayudará a aumentar la fuerza muscular, elasticidad y el equilibrio, así como beneficiará a nuestra salud mental.

Además, nos otorga otros beneficios físicos:
• Nos enseña a respirar de forma correcta y mejora las funciones cardio-respiratorias.
• Beneficia la estructura de la columna vertebral, su posición y sus funciones.

El Mindfulness

¡Lo mejor para vivir en el presente, en el aquí y el ahora!

Este es un estado mental que se logra al enfocar la conciencia en el momento presente, al tiempo que reconoce y acepta con calma los sentimientos, pensamientos y sensaciones corporales, sin juzgar y sin intentar cambiar nada.

Además, nos brinda otras habilidades:
1. Nos ayuda a desarrollar la inteligencia emocional y a tomar autoconciencia.
2. Mejora las relaciones interpersonales aumentando nuestra habilidad para comunicar las emociones.

A pesar de sus diferencias, tanto el Yoga como el Mindfulness comparten importantes beneficios para nuestra salud mental, entre los que están:
• Alivian al estrés, la ansiedad y aumentan la relajación. El principal beneficio por los que muchos se inician en estas prácticas. Cuando te enfocas en ti, unificando pensamientos y respiración, logras bajar tus niveles de estrés y preocupación.
• Nos ayudan a estimular la concentración y la atención. Al despejar la mente y enfocarse en un aspecto específico ayudamos a fortalecer el proceso de concentración.
• Nos enseñan a conocer nuestro cuerpo, a cuidarlo y ejercitarlo. Conocerse a uno mismo es un proceso complejo, pero al poner atención plena a nuestras emociones ayudamos a que podamos reconocer cómo nos sentimos y trabajar en ello.
• Proporcionan mayor estabilidad emocional. La relación que tenemos con nosotros mismos es importante para tener buena autoestima. Cuando podemos hacer consciencia de nuestras virtudes y defectos evitamos juzgarnos de forma severa.
• Mejoran el sueño nocturno e insomnio. Al liberar la mente y deshacernos de pensamientos innecesarios ayudamos al cuerpo a sentirse más descansado y relajado.

Si estamos buscando iniciarnos en estas prácticas lo fundamental es la disposición. Tener un pensamiento positivo sobre nuestras metas y resultados será el primer paso y al ir acostumbrándonos notaremos que mientras más motivados estemos podremos tener una mejor experiencia.

Recuerda, no es necesario acudir a ninguna clase presencial o tener un equipo especial. Ahora tenemos muchas alternativas digitales y hasta gratuitas para Iniciarnos en este mundo, además, ya contamos con las principales herramientas para trabajar: ¡Nuestra mente y cuerpo!

Para terminar, tengamos en cuenta que practicar mindfulness o Yoga es como ir al gimnasio: cuanto más constante seamos, más beneficios notaremos. Con unos minutos al día que dediquemos a alguna de estas actividades comenzaremos a forjar el hábito. Así de simple.

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Fuentes:

https://bit.ly/3xY5EKm

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https://bit.ly/3b5NxZS